Por Juan Barrientos
Publicado en El Precursor
Enviado por Mayanín Castro
Un estudio reciente reveló preocupantes niveles de azúcar y sal en los cereales de las corporaciones Kelloggs y Nestle que han afectado la salud de miles de consumidores en países latinoamericanos, según los datos de la investigación de Consumers International "Cereales peligrosos.
La verdad sobre la publicidad de alimentos dañinos dirigida a los niños" surge a raíz de la epidemia de sobrepeso y obesidad que ha afectado a Centroamérica.
La Red de Consumidores en Acción de Centroamérica y el Caribe (ConSuAcción) presentó un estudio a nivel regional en el que se constata que diversas presentaciones de cereales para desayuno de las transnacionales Nestlé y Kellogg's, que son publicitados como alimentos saludables para niños y niñas, contienen una alta y preocupante cantidad de sal y azúcar que ocasiona graves daños a la salud.
El estudio, que se enmarca en la investigación de Consumers International "Cereales peligrosos. La verdad sobre la publicidad de alimentos dañinos dirigida a los niños", surge a raíz de la epidemia de sobrepeso y obesidad que ha afectado a Centroamérica. Esta situación se ha convertido en una paradoja: por un lado una gran cantidad de población desnutrida y por el otro una cantidad considerable de personas que sigue consumiendo alimentos no sanos.
En 2005 la OMS estimó que 35 millones de personas fallecieron por enfermedades crónicas relacionadas al sobrepeso y obesidad y de éstas, el 80 por ciento vivía en países pobres.
En Centroamérica más del 50 por ciento de los adultos, principalmente mujeres, presentan serios problemas vinculados a este fenómeno nutricional y cada vez más, niños, incluso menores de 5 años, están experimentando estos tipos de enfermedades por el incremento en el consumo de alimentos procesados, como cereales refinados que contienen altas dosis de grasas saturadas, azúcar y sal.
"Estos elementos son un grave riesgo para la salud, porque están generando niños y niñas con problemas de diabetes, hipertensión y accidentes vasculares y celebrares", advirtió Ana Ella Gómez, directora del Centro para la Defensa de los Consumidores de El Salvador (CDC) y miembro de ConSuAccion.
"Esta situación está íntimamente vinculada al predominio del mercado versus el derecho a la salud de la gente. El crecimiento de la industria de los cereales altos en azúcar y sal -continuó Gómez- ha modificado nuestros hábitos de consumo, lo que ha generado un alto riesgo en la salud de la población y esta investigación, que llamamos "Dulcemente salado", está demostrando que Centroamérica ya está siendo afectada directamente por el consumo de estos cereales", aseveró.
"Dulcemente salado"